Bonus: Reflexiones sobre el futuro de la inteligencia articial
Les comparto mi experiencia en Github Universe, uno de los eventos más grandes que hay de desarrolladores, y algunas reflexiones sobre lo que la inteligencia artificial implicará para la humanidad
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Esta entrada está basada en los ensayos “Machines of Loving Grace” de Dario Amodei y “Situational Awareness“ de Leopold Aschenbrenner.
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Ahora sí, a lo que vinimos:
Acabo de volver de un viaje increíble a Estados Unidos y, luego de procesar toda la información y conocimiento que adquirí, decidí convencer a Carlos de adelantar este bonus. Los que nos acompañan en Crecimiento Consciente desde hace un tiempo quizás recordarán la primera entrada que escribí sobre este tema. Pues bien, lo cierto es que ya llevo más o menos un año trabajando con inteligencia artificial aplicada a casos reales de negocio.
Tras ver los avances tan increíbles, en todos los aspectos, que se han dado en el campo en los siete meses que transcurrieron desde esa entrada, creo que es momento de retomar el tema y sus implicaciones. Antes de tocar los avances en la generación de texto, con la que la mayoría de ustedes seguramente estará familiarizado, el progreso de la tecnología en los campos de la música, el audio y los videos ha sido igual de impresionante.
Por ejemplo, acá les dejo la versión más reciente de MusicFX de Google, que, entre otras, ya permite escoger en qué tonalidad se quiere componer la pieza musical.
Ahora así, en este corto tiempo, OpenAI ha evolucionado de ChatGPT 3.5 a O1, y la diferencia en calidad, escala y eficiencia es de órdenes de magnitud. Entre muchas otras, en las soluciones para negocios que desarrollo sobre esta plataforma, esta mejora en los modelos nos ha permitido pasar de generar automáticamente contenido de texto a poder realizar llamadas —audio a audio— de ventas y clasificar clientes por categoría en cuestión de segundos. Para que se den una idea de su poder, aquí les dejo una grabación de una llamada real realizada por una inteligencia artificial.
¿Cómo interpretar estos saltos de calidad tan grandes en materia de Inteligencia Artificial en tan poco tiempo? Y, más aún, ¿qué esperar para los próximos años?
Para responder a estas preguntas me referiré, principalmente, al ensayo “Conciencia Situacional” escrito por Leopold Aschenbrenner, un ex miembro del equipo de “Superalineación” de OpenAI, la empresa de inteligencia artificial más grande del mundo en la actualidad. Esta es una división que surgió de la convicción de que no sólo vamos a lograr inteligencia artificial generalizada (AGI) —es decir, que la máquina piense como los humanos—, sino que, más temprano que tarde, vamos a alcanzar la denominada superinteligencia artificial —que la máquina piense mejor que los humanos en todos los campos del conocimiento—. Y, ante este prospecto, en donde los beneficios para la humanidad van a pasar por su capacidad para poder controlarla, necesitamos un algoritmo de superalineación que asegure que estos modelos no tomen caminos indeseados ni ocurran eventos distópicos como los que plantean películas como “La era de Ultron”.
La escala de la evolución inorgánica
Sí, lo sé, parece magia o que les estoy contando un cuento, pero como dice Leopold: “No necesitan creer en ciencia ficción, sólo en líneas rectas en un gráfico”. Acá les dejaré el gráfico en cuestión, donde vemos la evolución en la capacidad computacional efectiva de los modelos a través de los años y lo que, de seguir así, implicaría para los próximo tres años escasamente.